La era acústica y su relación con el movimiento de Cultura Libre-
Marshall McLuhan -filósofo y comunicólogo canadiense- es conocido por desarrollar una teoría sobre la globalización basada en las nuevas posibilidades sociales y congitivas que inauguran los medios electronicos de comunicación. Ya hacia los 1960’s, décadas antes de que el Internet se posicionara como tecnología comercial, McLuhan acuó el concepto de Aldea Global, con el cual se refería a una sociedad mundial interconectada a través de las redes electronicas. “La interdependencia electronica vuelve a crear el mundo a imagen de una Aldea Global. ¿Qué quería decirnos McLuhan con esto?
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Entre los efectos más profundos que las tecnologías electrónicas tienen para McLuhan, se encuentra el regreso a una forma de comunicación basada en las funciones del hemisferio derecho de nuestro cerebro. Según el canadiense, la escritura alfabética a trajo consigo una dominación del hemisferio izquierdo sobre el derecho, lo que se deja ver en una preponderancia de la razón, la linealidad, la lógica matemática y en general las formas de pensamiento de tipo racional. Un universo preponderantemente VISUAL. En contraste, los medios electrónicos, con sus nuevas formas de escritura digital, implican un regreso al universo ACÚSTICO de hemisferio derecho, entre cuyas funciones se encuentran la intuición, la simultaneidad, la abstracción, la dispersión, los sentimientos y la creatividad.
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Volvemos, entonces, a un mundo similar al de las sociedades tribales que no conocieronla escritura alfabética, o que por lo menos no basaron en ella su cultura. “La clave de nuestro futuro desarrollo como especie dependerá de lo bien que comprendamos la relación entre el lado izquierdo y el derecho de nuestra corteza asociativa”. Para McLuhan, es urgente desarrollar herramientas analíticas que nos permitan comprender el cambio civilizatorio que vivimos. Veremos a continuación una de dichas herramientas.
El tétrade como herramienta de análisis tecno-cultural
Una de las herramientas analítcas que McLuhan propuso para estudiar los cambios culturales que hemos comentado es la ‘figura tetrádica’ o ‘tétrade’, que consiste en un esquema gráfico que permite visualizar el impacto que las tecnologías de comunicación tienen sobre la cultura. Segun McLuhan, “todas las formas de comunicación (A) intensifican algo en una cultura mientras que al mismo tiempo (B) vuelven obsoleta otra. También (C) recuperan una fase o factor dejado de lado desde tiempo atrás y (D) sufren una modificación -o inversión- cuando se las lleva más allá de los límites de su potencial”. La siguiente imagen muestra como se visibiliza esta herramienta:
¿En qué consiste dicha INVERSIÓN?
Los dos senderos y la importancia
de la Cultura Libre en esta bifurcación
De las cuatro esquinas del Tétrade de McLuhan, la (D) INVERSIÓN es la que despierta mayores polémicas y despierta mayores interrogantes, dado que es la que proyecta el futuro que la transformación en proceso trazará. El tétrade es, en palabras del propio Marshall, “una forma de anticipar los cambios en el ‘ma’ (espacio negativo)”, que es el reverso -inversión- de los efectos visibles que la transformación tecnológica trae consigo.
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Si bien es claro que el Internet ha propiciado una (A) INTENSIFICACIÓN en el flujo informativo, que tiende a (B) VOLVER OBSOLETA la idea de intimidad en la medida en la que las redes sociales y la telefonía celular funcionan como una ‘puerta abierta al pensamiento’, y que ha (C) RECUPERADO formas de organización que tienden a la horizontalidad, la colaboración y la apropiación de los medios productivos, no tenemos claridad respecto al modo en el que estas transformaciones terminarán por establecerse en el futuro. Lo que parce evidente, en todo caso, es que exiten dos senderos posibles: dos historias sobre la forma en que los perjuicios y beneficios de las tecnologías electronicas podrian equilibrarse en las próximas décadas:
1)
El “sendero oscuro”, que invierte la descentralización incial del Internet para volcarse en sistemas hipercentralizados de cultura (pensemos en plataformas como facebook y google, que se apropian de la información de miles de millones de personas el mundo); que invierte el beneficio del flujo informativo transformándolo en sistemas de control social sumamente finos; que invierte el acceso a información útil y distribuida, para convertirse en un desinformación generalizada por exceso de “ruido”; y en el que se pierde toda movilidad humana por estar siempre conectados a Internet.
2)
El “sendero lumínico”, que invierte la pérdida de intimidad y privacidad a favor de una sociedad menos individualista y más apegada a formas de convivencia comunal; que invierte la falta de convivencia “cara a cara”, abriendo la posibilidad de que personas de distintas partes del mundo se conozcan y generen lazos humanos dentro y fuera del Internet, y que invierta la dispersión a favor de una canalización de objetivos compartidos por personas en todo el mundo, aprovechando la posibilidad de controlar los medios de producción de contenidos culturales. En suma, este sendero estaría regido por una nueva concepción de la libertad y la autonomía comunitaria, y no por el extremo control social que el “sendero oscuro” implicaría.
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Frente a este panorama, la Cultura Libre se observa como un espacio fundamental porque cuestiona no sólo la manera en la que las tecnologías electrónicas se estan cobrando tanta relevancia en nuestros tiempos. sino también, y sobre todo, la forma en que la sociedad podria aprovechar dichas tecnologías para crear una cultura basada en en el COMPARTIR, en en PROCOMÚN, en una nueva concepción de la AUTONOMÍA y en la distribución canalizada de información útil para la vida.
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En un mundo ACÚSTICO como en imaginado por McLuhan -un mundo regido por la
simultaneidad, la dispersión y la reivindicación de los afectos como elementos fundamentales de la sociedad-, hace falta comprender las energías contradictorias que dirigen el devenir del mundo y la cultura. Existen nuevas puertas, sin duda, pero también nuevos peligros que no podemos ignorar si queremos ser partícipes activos de la Historia.
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La ALDEA GLOBAL, podría ser el mundo de las “Autonomías del hemisferio derecho”, o podría ser el relato de un control sin precedentes que amenace con destruir a la humanidad o por lo menos lo que de humano tiene la misma. Como escribe Lawrence Lessig, la Cultura Libre no trata tanto del Internet sino “de en un efecto que el Internet tiene más allá de sí mismo: un efecto sobre la manera en la que la cultura es contruida”.
¿Quién tiene el derecho, si no nosotr@s, decidir la forma en que la que nuestra cultura está siendo construida?